Durante la inspección se verifica el cumplimiento del Decreto Supremo 374/1997 del Ministerio de Salud, sobre los límites máximos permisibles de plomo en pinturas y además, el reglamento en relación al tolueno.
Ante el inicio de un nuevo año escolar, la Autoridad Sanitaria intensificó las fiscalizaciones de útiles escolares con el fin de verificar en terreno el cumplimiento de la normativa y cuidar así la salud de los niños y niñas de la región.
Al respecto la Seremi de Salud, Else Haeberling, señaló “Los niños entran al colegio y es cuando los padres empiezan a comprar los útiles escolares y la idea es poder revisar y fiscalizar los diferentes lugares donde se venden artículos para poder proteger la salud de la población”. Puntualizó.
Sobre la fiscalización realizada, Haeberling explicó que “Se revisó que el etiquetado esté en español, que cualquier persona pueda leer cuáles son los componentes, la normativa obliga a que no se use tolueno en adhesivos y pegamentos y en relación al plomo, que está presente en las pinturas que tienen mucho brillo, los padres deben revisar las temperas y plasticinas”.
Durante la jornada realizó la fiscalización en librerías del centro de ciudad de La Serena. Sobre la inspección efectuada la Autoridad Sanitaria comentó “En Librería Rojas encontramos los productos muy bien etiquetados y todos en español, y en Lápiz López solamente dejamos la indicación que nos entregaran un informe de los componentes de algunas marcas de productos escolares que estaban en otro idioma y les dimos un plazo de 72 horas para que nos presentaran en la SEREMI de Salud los componentes de cada producto”.
Finalmente, la Seremi señaló que se continuará con las fiscalizaciones de útiles escolares y en la oportunidad hizo un llamado a los padres. “Son los principales fiscalizadores de los productos que compran para sus hijos, si encuentran que un producto no está etiquetado en español o le merece duda o tiene un olor muy fuerte deben estar alerta. Además, no deben comprar en establecimientos no certificados y donde los productos no tengan la calidad que se merecen sus hijos”.
