El Tambo celebró fiesta patronal en honor a la Inmaculada Concepción
Con sus casas y calles adornadas en honor a la virgen, la localidad se vistió de fiesta y acogió a todos los peregrinos.
El pasado fin de semana en la localidad de El Tambo, en la comuna de Vicuña, tras la tradicional novena de la iglesia Católica que involucra nueve días de comunión en la fe, se dio el cierre a una nueva fiesta religiosa en torno a la imagen de la Inmaculada Concepción, lo que finalizó con diversas actividades, entre ellas una caravana de autos que reunió a centenares de fieles, bautizos y la fiesta patronal.
La celebración comenzó desde temprano con la misa de varones que tradicionalmente se lleva a cabo a las ocho de la mañana y la cual concluyó con un desayuno, para dar paso al mediodía a la celebración de la liturgia de fiesta y la tarde la misa de fiesta, para luego recorrer las calles del pueblo con bailes religiosos.
Frente a ello el párroco José Luis Flores, quien acompañó en toda la novena a la comunidad, destacó lo importante de este hecho para los creyentes. “Se debe destacar la importancia que tenemos los católicos en transmitir nuestra fe de generación en generación, y la importancia que tiene nuestra madre como intercesora ante el señor”.
Es necesario destacar que esta iglesia de la localidad creada en el siglo XVI es una de las más antiguas del país y la primera creada en el Valle del Elqui, por ello a pesar de que el tradicional Corso de Vicuña se suscitó el mismo día, existió una gran participación de fieles. Así lo destacó Sebastián Tapia, quien participó junto a su familia de la Novena. “Este año asistieron muchas más personas, y pese a que durante el mismo instante de la fiesta, se llevaba a cabo el corso de Vicuña, los fieles se hicieron un tiempo para dar gracias y orar a nuestra madre, la santísima virgen María. Los residentes del pueblo ya sienten propias las tradiciones que se llevan a cabo durante la novena patronal, y eso se puede evidenciar en la alta asistencia a ella y además de diversos gestos de cariño para acoger peregrinos, prestar su ayuda y asistir a las diversas celebraciones”.
Concluyendo el día de fiesta, y posterior a la procesión se llevó a cabo la peregrinación por las calles del pueblo en donde la virgen recorrió la calle principal acompañada de los asistentes y de los diversos bailes religiosos que vienen desde diferentes partes de la región y que comenzaron a llegar a bailar desde el día sábado en la tarde para acompañar a la patrona del pueblo.