Sonetos para Violeta
Por: Juan Carlos Robles
I
Hay cantora del sur empobrecida
que aventaste tu canto en las chinganas
Mujer morena, soñadora y artesana
ceramista de la greda embravecida
Hay señora guitarrera que dejaste
tu legado vibrando en las guitarras
Ningún cantor ha soltado tus amarras
ni el amor doloroso que soñaste
De San Carlos no lo sé a ciencia cierta
o San Fabián como dice la leyenda
tras tus muerte se cerró raída puerta
Y brotaron de cantores las ofrendas
a lo humano cantaron por la muerta
y a lo divino también pusieron prenda
II
En un circo de carpa hecha jirones
payaso triste que reía y que lloraba
Y en peñas mortecinas allí cantaba
con dolor la Violeta a sus amores
De Santiago hasta Paris fuiste pionera
del talento innato de chilena
De los Parra venia esta verbena
como ríos corriendo por sus venas
Un angelito de marcho para los cielos
en tu carrera loca por la fama
yerto se durmió en pobre cama
Entre llantos desgarrados y desvelos
poco a poco se apagó como una llama
y entonaste canciones por su alma
III
Gracias a la vida ¡Señor que ironía!
esta jardinera triste así cantaba
Entre arpegios de guitarra suspiraba
por su loco Run Run que se siempre huía
Del norte para el sur loca veleta
por todas partes iba la Violeta
Cantando, pintando total era su meta
ganarle a la vida, su vendetta
Y la vida le gano una tarde quieta
en tragedia se marchó a las estrellas
y a cantores les dejo sus letras bellas
Hoy te cantan en las esquinas y salones
los cantores que te nombran guitarrera
aún vive entre nosotros la guerrera