Valle de Elqui
Por: Juan Carlos Robles; (Chapilca)
Valle de Elqui
Herida lacerante del norte de mí patria
Cuenca loca de tus ríos
De sangre arsenicosa y plateada
Que se vienen cascabeleando juntos
Sobre el lomo lizo del paralelo treinta
Y se dejan caer mansos
En la aguas azuladas
Del océano pacifico
Dejando a su paso ligero
Por majadas y senderos
Un murmullo eterno de lamento
Valle de Elqui, trenzado de montañas y repechos
Que vigilan de cerca
El verde pálido de los parronales
Oro verde y codiciado por las manos curtidas
De las sufridas temporeras
Valle de Elqui yo te canto
Con mi voz parca y mi lápiz rudo
Herencia sagrada de mis ascentros
Que dejaron durmiendo entre laderas arcillosas
El legado eterno de la cultura americana
Valle de Elqui coronado
De nieve y oro en la montaña
De senderos estrechos donde grita el ovejero
De sol candente, uva rosada
Pezón del néctar cristalino
Que me embriaga
Con pueblos que se acomodan
Como ellos pueden para formar la comparsa
De este carnaval moreno, que se desgrana
Desde las viejas tranqueras
Hasta las playas mansas
Valle de Elqui, yo he escuchado
Al terral viento antiguo y aldeano
Que ha traído con aliento tibio
Hasta las fibras más sensibles de mi alma
Este canto fuerte, pero inculto de metáforas.